- Nació en Sucre el 15 de Diciembre de 1943,
- Ordenado Presbítero el 10 de Junio de 1967,
- Fue elegido Obispo de Potosí el 6 de octubre de 1984.
- El 31 de julio de 1996 fue promovido a Arzobispo de La Paz por el Papa San Juan Pablo II
- Fue posesionado el 29 de septiembre de 1996.
- En 1999 fue nombrado Miembro del Consejo Administrativo de la Fundación Pontificio Consejo "Populorum Progressio" cargo que desempeña hasta la fecha.
El jueves 8 de junio es una fiesta a la que se unen varios motivos para vivir la Eucaristía celebrada en el Seminario Mayor San Jerónimo de La Paz a horas 11:30am Mons. Edmundo citó las celebraciones de feliz coincidencia comenzando por la de la celebración de Jesús Sumo y Eterno Sacerdote, luego para rezar por la perseverancia y la acción del Sacerdocio común de los fieles y de los ministros ordenados, el retiro mensual del clero, el encuentro de sacerdotes jóvenes de la Provincia Eclesiástica de La Paz.
En la Homilía el Arzobispo de La Paz dijo: "Particularmente siento que todo éste año es un año santo de los 50 años de sacerdocio. Es el Señor que me ha permitido ir donde el Santo Padre, visitar tierra Santa..." Prosigue la homilía "En mi vida sacerdotal llevo cuenta de los 22 ordenaciones presbiterales primero en la Diócesis de Potosí donde fui Obispo. Luego 55 en la Arquidiócesis de La Paz de los cuales 33 son diocesanos, de los cuales 4 han dejado el ministerio por diversas razones y 22 religiosos".
"La vocación sacerdotal esta llena del amor de Dios y de la alegría contagiando a los demás, al igual que hay sufrimiento" al recordar algunos pasajes de su vida y su vocación dijo: "Recuerdo que mi familia ha sido muy creyente a mis 5 años mi abuelita nos motivaba a ir a misa pero ella no podía ir al regresar a casa ella preguntaba el mensaje y lo que dijo el padre y se me ocurrió celebrar la misa a los 5 años con las hostias de jalea dulce ayudado en mi casa y le decía que yo iba a darle la misa y su actitud de ella era de mucha fe".
Otra anécdota fue: "Como ya era sacerdote el médico que atendía a mi madre al estar ella enferma se dirigió a mí para decirme que estaba gravemente enferma y al preguntarle cuanto tiempo le quedaba de vida me dijo dos meses y que fuera yo el que avise a la familia...." El sacerdocio es una vida de entrega al Señor, de madurez en la fe, de alegría, gozo pero también se debe atravesar el sufrimiento pero vale la pena porque el Señor sabe a quien confiar y llamar a su servicio. Por último invitó a todos los asistentes a seguir acompañando con la oración por la perseverancia de los sacerdotes y seminaristas y para que surjan nuevas vocaciones para la Iglesia.
Luego tuvo lugar un almuerzo de confraternidad del que participaron Obispos de la provincia eclesiástica, Sacerdotes, Seminaristas, Religiosas y laicos.